La maldita sonda...

Hoy mi mamita, amaneció un poquito con menos ánimo que el resto de los días. Aunque durmió mucho mejor al parecer que el día de ayer en la casa. La cosa es que hoy estuvo con mucho carraspeo en el garganta y no entendíamos con la señora Mariluz el porqué. Pensábamos que estaba resfriadita, porque tosía y estornudaba. Pensamos que le costaba y le dolía muchisimo tragar, porque vomitó parte de la comida de la hora de almuerzo. Y cuando ya se hubo ido la sra. Mariluz a las seis, todavía tenía esa sensación de dolor y carraspeo en la garganta. Cómo adivinarlo! Llamé a la Chechi (nuestra prima fonoaudióloga), que me dió algunas instrucciones y todo por lo que le estaba sucediendo.

Pero nunca, nunca pensamos que la sonda se podría haber salido de raíz, cuando me disponía a colocarle los remedios a las nueve de la noche. Totalmente afuera, (la sonda va desde la nariz hasta el estómago). Rápidamente con nuestras vecinas que estaban en la casa, pensamos en quién podría volver a colocársela, y gracias al cielo que justo venía llegando la señora Margarita, que vive a tres casas, y que fue enfermera de la Urgencia por más de 30 años acá en Curicó.

Llegó de inmediato. Y a pesar de que mi mamá estaba muy delicadita, se la volvieron a colocar. Le costó tanto, que lloraba, gritaba, se la quería sacar, no permitía que se la pusieran  y sufría con lo que le estaban haciendo. Pero ella debía poner de su parte para volver a colocarla en su lugar, era la única manera, y vaya que le costóooooo... yo, con mis nervios ya derrotados no pude con eso y tuve que salir... Pero cuando volví a entrar estaba tranquilita y agotada... Que horrible sonda, la odio, es lo peor... espero que pueda pronto volver a tragar por sus propios medios para que le podamos quitar esa porquería  Ahora, mamita está tranquilita durmiendo, esperemos que mañana sea un mejor día...